El encapsulamiento es frecuentemente descripto como el primer pilar de la programación orientada a objetos. Es el mecanismo de agrupar los datos (atributos) y los métodos (funciones) que operan sobre esos datos dentro de una única unidad u objeto. Este concepto también se conoce como ocultamiento de datos, ya que la representación interna del objeto se oculta al mundo exterior.
La herencia es un concepto fundamental en la programación orientada a objetos que permite que una nueva clase se base en una clase existente. La nueva clase, conocida como clase derivada o clase hija, hereda atributos y métodos de la clase existente, llamada clase base o clase padre. Este mecanismo promueve la reutilización de código y establece una relación entre clases.
El polimorfismo es un concepto fundamental en la programación orientada a objetos que permite que objetos de diferentes clases sean tratados como objetos de una clase base común. El término “polimorfismo” proviene del griego y significa “muchas formas”. En POO, se refiere a la capacidad de una única interfaz para representar diferentes formas subyacentes (tipos de datos o clases).
La abstracción es el proceso de ocultar los detalles complejos de implementación y mostrar solo las características necesarias de un objeto. Se trata de crear una vista simplificada de un objeto que represente sus características esenciales sin incluir detalles de fondo o explicaciones.
La Programación Orientada a Objetos es un paradigma poderoso que proporciona una forma de estructurar el código que refleja estrechamente las entidades del mundo real y sus interacciones. Los cuatro conceptos fundamentales que hemos explorado - encapsulamiento, herencia, polimorfismo y abstracción - trabajan juntos para crear código flexible, mantenible y reutilizable.